Este domingo, los Cowboys van a encarar a los Rams en un encuentro que puede definir el futuro de Dallas en la postemporada. No solo es importante porque es el último de tres partidos que faltan en la temporada regular. Igualmente, no hay que dejar pasar el hecho que los Rams fueron el equipo que los eliminó en la pasada campaña. Además de algunos otros tópicos de interés que hay que mencionar.
Por supuesto, hay que mencionar esa amarga derrota por la ronda divisional la pasada temporada. Dallas en esa oportunidad permitió 273 yardas por tierra. Esta es la mayor cantidad de yardas por acarreos que han permitido los Cowboys en un juego de postemporada. Afortunadamente para el equipo de la estrella solitaria, los Rams ya no cuentan con C.J. Anderson, quien logró 123 de esas 273 yardas durante ese encuentro.
Todd Gurley es quien ahora tiene la responsabilidad de recordar esa derrota por 30 a 22. En este momento maneja 721 yardas por acarreos y nueve anotaciones por tierra, aparte de un TD extra por jugada de pase.
Para Dallas, esto no solo es un juego para mantenerse en lo más alto de la NFC Este. También representa un juego de revancha que puede aniquilar con cualquier esperanza de los Rams de llegar al menos de comodín. El equipo de Los Angeles lo tiene muy difícil este año con el gran nivel de los 49ers y los Seahawks en la NFC Oeste.
Con respecto a los Mariscales de campo, tanto Prescott como Goff se manejan como QB de garantías para ambas franquicias. Como dato curioso, ambos comenzaron su año de novato en el 2016. En el caso de Dak, fue escogido durante la cuarta ronda del draft de 2016. Caso muy distinto al de Jared Goff, quien fue el primer pick de ese año. Sin embargo, los datos de Prescott han sido mucho más sólidos esta temporada, como bien lo indica esta imagen.

Otra rivalidad que llama mucho la atención es la de Jason Garrett y Wade Phillips. Tanto el entrenador en jefe de Dallas como el coordinador defensivo de Los Angeles tienen un pasado que vale la pena mencionarse.
Tanto Patrick Crayton como Jesse Holley, antiguos receptores de los Cowboys, afirmaron en una entrevista hace cinco años para 105.3 The Fan que Garrett saboteó el trabajo de Phillips cuando uno era el coordinador ofensivo y el otro entrenador en jefe, respectivamente. Para ese entonces, el equipo tenía un récord de 1-7 y promediaba 20,1 puntos por juego. Una vez que despidieron a Phillips y colocaron a Garrett en la décima semana de 2010, los números cambiaron drásticamente. Pasaron a promediar 29,1 puntos por encuentro y terminaron la temporada con 5-3.
Igualmente, Holley afirmó que Garrett llegó con nuevos libros de jugadas ofensivas en una reunión del equipo justo después que se anunciara que Phillips había sido despedido. Tras esta entrevista, hay un tweet del mismo Wade Phillips, en donde coloca sus récords como entrenador de Dallas, comparándolos con los de Garrett para ese momento.
Jason Garrett is tied with Wade Phillips for 56 games as the @dallascowboys head coach. Phillips: 34 – 22; Garrett: 29 -27. #suprisesMe
— Wade Phillips (@sonofbum) March 6, 2014
Por supuesto, tres horas después de este tweet, llegó con una explicación para evitar cualquier tipo de controversias. “Mi sorpresa es que Jason y yo hayamos manejado la misma cantidad de juegos, no el récord. El tiempo pasa rápido, le deseo bien a Jason y los Cowboys”.
https://twitter.com/sonofbum/status/441735724182671361
Si hablamos de Garrett, se llena de elogios hacia Phillips. “Tengo tremendo respeto por Wade”, afirmó Jason en una llamada grupal con reporteros de los Rams. “Tuve la oportunidad de trabajar con él acá en Dallas cuando era nuestro entrenador en jefe. He aprendido mucho gracias a su persona. Sus grandes éxitos hablan por sí solos en todo el tiempo que ha estado en la NFL. El éxito que ha tenido con los Rams no es ninguna sorpresa, ya que es un gran entrenador. Será un gran reto para nuestro equipo”.
Como otro punto a destacar, tenemos la vuelta del ala defensiva Robert Quinn a otro de sus antiguos equipos. En esta oportunidad es la franquicia de los Rams, en donde jugó sus primeros siete años en la NFL. Ya tuvo una excelente labor ante los Miami Dolphins por la Semana 3, otro de sus antiguos equipos. Así que se espera lo mismo para este fin de semana.
Este es un juego de vida o muerte para ambos equipos. No obstante, ya veremos que sucede en el AT&T Stadium y si los Cowboys logran acabar con esta segunda racha negativa de la temporada. El objetivo sigue siendo la postemporada, y sus rivales en la NFC Este se lo están colocando muy fácil.