Hay que estar claros que los Cowboys no están pasando por su mejor momento. Dos derrotas seguidas no son precisamente el mejor estímulo en una campaña. Además, fue contra posibles rivales de Conferencia en postemporada, lo que lo hace aún más grave. Sin embargo, muchas críticas se van hacia el QB Dak Prescott. Cuyas intercepciones en momentos clave han costado incluso los resultados. Esto se vio en la Semana 5 ante los Green Bay Packers.
Prescott no se caracteriza por ser un Mariscal que reciba muchas intercepciones. De hecho, tiene un gran historial de ser un Mariscal que protege mucho el balón. Lamentablemente, las cosas no han salido bien ante los Saints y los Packers. Por supuesto, parte de la responsabilidad va a caer en su persona y es algo que Dak tiene que asimilar.
Cabe destacar un detalle muy interesante. Y es que Dak está promediando 312 yardas en pases esta temporada. Lleva hasta el momento 1606 yardas y 11 Touchdowns. Desde este punto de vista, hay que añadir que las 463 yardas por pases ante Green Bay, es lo mejor que ha hecho en lo que va en la temporada. Con todo y esto, el resultado final fue negativo.
Sin embargo, esto también lo eclipsan las intercepciones. Lleva seis esta temporada y solamente tres fueron ante los Packers. Con una última fatal en el último período ante los de Green Bay gracias a Kevin King. Que quizás cambió totalmente el curso del partido.
“No es algo de lo que estoy orgulloso, no es algo que me gusta ver, independientemente de si sucede por una razón u otra,” dijo Prescott. “Seguridad en el balón, trabajar en la seguridad es algo que siempre he dicho y en lo que siempre he creído. No es divertido entregar el balón”.
Claro está, hay que destacar que no todas las intercepciones de Prescott tienen un patrón. Dos de ellas fueron por balones sueltos de Randall Cobb y Amari Cooper. No es que esté absuelto de culpa por esto, pero también hay que entender que son situaciones que no puede cambiar. Ya que los pases iban dirigidos a sus receptores y de hecho recibieron el balón.
“Si miras las jugadas en específico, así es como hay que evaluarlas”, afirmó el entrenador en jefe Jason Garrett, con respecto al rendimiento de su QB.
“No voy a cambiar la manera en que juego”, dijo Prescott. “Tengo confianza en dónde estoy. Me gusta y no voy a cambiar eso. Tengo mucha confianza en lo que puedo hacer. Confío en que mis compañeros hagan jugadas, ya sea en balones 50-50 o simplemente en situaciones más difíciles, sabiendo que van a ir a buscarlo. Es su balón o no es de nadie. No cambia en nada para mí”.
Igualmente, Kellen Moore confía en su QB y no quiere que cambie su estilo de juego tampoco. “No quieres que nadie juegue de manera pasiva”, dijo Moore. “No vas a ser capaz de jugar como Mariscal muy bien si lo haces de forma pasiva, lanzando sólo checkdowns y ese tipo de cosas. Lo reconocemos. Seguimos adelante, y creo que Dak está muy bien”.
Si bien es cierto que esto de las intercepciones está molestando mucho los números de Prescott, la verdad es que se ha visto una gran evolución en el jugador. También hay que destacar la gran influencia del entrenador de Mariscales Jon Kitna. Ahora tiene una mayor visión de juego y toma muchos más riesgos que no se veían en temporadas anteriores. Puede que no le guste a todos su manera de jugar, pero Prescott se está haciendo notar en la NFL. Ahora tiene una nueva prueba ante los Jets este domingo, que esperamos pueda superarla sin ningún problema.