Cuando se publicó la noticia de que Travis Frederick se retiraba de la NFL todos los fanáticos de los Cowboys quedaron en shock. No es para menos, obviamente. Perder a un jugador así de un momento a otro hace tambalear a cualquier estructura. Que se vaya del equipo un titular indiscutido es muy difícil de aceptar. Si es en un puesto clave como el del centro, mucho más. Aunque la influencia que tuvo en la franquicia fue iba allá de lo deportivo.
Quizás Jerry Jones algo intuía. La extensión de contrato a Joe Looney tenía sentido, pero ahora resulta incluso más importante todavía. Él es el quien corre con ventaja para ser el reemplazante en la próxima temporada. Hay que remarcar que Looney fue el centro titular cuando Frederick estuvo afuera todo el 2018. Connor McGovern y Adam Redmond son las otras dos posibilidades dentro del roster actual.
Pero más allá de que cualquiera de ellos haga un decente trabajo, suplantar a Frederick no será una tarea sencilla. El trabajo del centro no es simplemente el de entregarle el balón al mariscal de campo sin cometer errores. Al menos ese no era el caso con el #72.
Uno de los motivos por que fue fundamental dentro de la cancha fue su capacidad para ordenar a toda la línea ofensiva. Identificar las cargas era una de las cosas que hacía de gran manera para que la jugada se pueda desarrollar según lo planeado. También se destacó por hacer ajustes antes del snap dependiendo de lo que veía en la defensiva rival.
Los Cowboys saben mejor que nadie la importancia de tener una línea ofensiva funcionando armoniosamente. Estas cuestiones exclusivamente vinculadas al juego en sí quizás con algo de suerte se puedan lograr conseguir en otro liniero. Sin embargo, eso no es lo más difícil de suplantar.
La gran influencia que tenía Frederick iba más allá de lo que sucedía cuando la ofensiva saltaba al terreno. Como primer punto hay que mencionar que era uno de los capitanes. Indudablemente era el gran líder del vestuario. No se basaba simplemente en palabras, sino que era una de esas personalidades que demuestran con el ejemplo.
“Mirando hacia atrás en nuestra carrera juntos, cómo Travis manejó la temporada 2018 es una de las cosas que creo que podría ser más notable. Lo recuerdo sentado una mañana en el desayuno, haciéndonos saber que era probable que no pudiera jugar esa temporada”, expresó Zack Martin en un segmento del mensaje que publicó en su cuenta de Instagram.
El guardia derecho confirmó luego el compromiso de Frederick con el equipo incluso en aquel momento tan difícil: “Muchas personas que están fuera de temporada pueden verlo como un momento para relajarse, rehabilitarse y seguir con su vida. No Travis. Acudía a todas las reuniones, visitas, cenas de los jueves y juegos. Siempre comprometido, Travis buscaba continuamente formas de ayudar a nuestro equipo. Después de esa temporada, volvió al negocio, directamente a la sala de pesas para prepararse para la próxima temporada. Aunque no logramos el objetivo final, Travis se recuperó, retomó justo donde lo dejó, tomó el mando del grupo y agregó otro Pro-Bowl a su currículum”.
Las palabras de Martin de Martin son más que valiosas para comprender mejor lo que significaba el centro para todos. Esa ética de trabajo es algo muy complejo de conseguir. El respeto que tenía de sus compañeros iba más allá de ser uno de los mejores en su puesto.
If you are a young player on the OL and want to get better today- pull up tape of @tfrederick72. When he first joined the team-he was good. Then, every year he got better and better. He was All-Pro, and I never saw him take a play,practice or meeting off. Hell of a player+career.
— Jason Witten (@JasonWitten) March 24, 2020
La frase “primero en llegar y último en irse” aplica perfectamente en su caso. Una voz tan autorizada como la de Jason Witten no hace más que clarificarlo: “Si eres un jugador joven en la línea ofensiva y quieres mejorar hoy, mira videos de Travis Frederick. Cuando se unió al equipo por primera vez, era bueno. Luego, cada año seguía mejorando. Era un All-Pro y nunca lo vi tomarse un juego, una práctica o una reunión de descanso. Excelente jugador/carrera”, publicó el histórico ala cerrada en su cuenta de Twitter.
Por todos estos motivos es que la ausencia de Frederick se va a sentir mucho. La fortuna quizás ayude al próximo centro titular de Dallas para que pueda cumplir todas las funciones requeridas del puesto de una gran manera. Sin embargo, nadie podrá suplir lo que aportaba fuera del terreno. Un verdadero All-Pro en todo sentido.
