Se puede afirmar que la ofensiva fue lo que mantuvo a flote hasta la última jornada a los Cowboys la temporada pasada, pero lamentablemente, esto no fue suficiente para asegurarle al equipo un cupo en la postemporada.
Sin embargo, esta temporada muy seguramente veamos una ofensiva inclusive más eficaz que la del 2019, gracias a un par de adiciones durante la temporada baja, pero más importante aún, gracias a un cambio de identidad que podríamos ver tras la llegada de Mike McCarthy.
La identidad del equipo bajo el largo mandato de Jason Garrett se caracterizó por ser una que le daba prioridad a la posesión del ovoide durante la mayor cantidad de tiempo posible, disminuyendo así las posibilidades en ataque del rival; aunque ahora con Kellen Moore siendo influenciado por McCarthy, me atrevería a afirmar que esto cambiará radicalmente.
No solo la ofensiva dejará de ser tan pasiva y pasará a ser más agresiva, sino también, si tuviese que hacer una proyección a futuro, estaría casi 100% seguro de que los Cowboys basarán la mayor parte de sus snaps ofensivos utilizando una formación ’11-personnel’.
¿Qué es 11-personnel? Para ponerlo fácil, es una formación basada en un corredor (1 RB), un ala cerrada (1 TE) y tres receptores abiertos (3 WR). ¿Por qué se le llama 11-personnel? Puesto que las formaciones a la ofensiva se denominan de la siguiente forma:
En el lado ofensivo del ovoide, un equipo tiene 11 jugadores, de los cuales seis (comúnmente) son ocupados por el mariscal de campo y sus cinco linieros ofensivos (Centro, dos guardias y dos tackles), dejando así un total de cinco puestos restantes los cuales el equipo puede manejar a su disposición combinando los corredores, alas cerradas y receptores que deseen.
Cuando se refieran a “Personnel” este siempre será un dígito de dos cifras; el primero refiriéndose a la cantidad de corredores en la alineación (RB), el segundo a la cantidad de alas cerradas (TE), y siendo el restante la cantidad de receptores abiertos (WR) que darían un total de cinco jugadores.
Por ejemplo, por una formación “10-Personnel” entendemos que se formará un corredor, ningún ala cerrada y el restante para llegar a cinco serán receptores abiertos, es decir, un total de cuatro. A continuación, una tabla que ejemplifica las formaciones de Personnel existentes:
Ahora bien, una vez dejado en claro qué es el 11-personnel, volvamos a lo que nos interesa: los Dallas Cowboys.
Los Cowboys lograron hacerse con uno de los mejores prospectos del país este año en cuanto a receptores abiertos se refiere, y obviamente nos referimos a CeeDee Lamb, quien gracias a su llegada convierte al cuerpo de receptores vaquero en uno de tres jugadores realmente temibles, lo que los hace perfecto para ejecutar un 11-personnel con mayor efectividad.
Además, los Cowboys contarán también con una nueva cara en la posición de TE titular, luego de que el veterano Witten se marchase a Las Vegas y Blake Jarwin tomase su lugar, lo cual desde mi punto de vista, parece ser un gran upgrade, ya que Witten no tuvo la mejor de las temporadas el año pasado.
Por esto, el conjunto vaquero puede verse (y debería verse) más inclinado a utilizar 11-personnel este año, y por qué no, tratar de emular lo hecho por los Rams del 2018.
Ese año, el conjunto de Los Angeles logró llegar al Super Bowl utilizando la formación 11-personnel nada más y nada menos que en un 90% de los snaps de acuerdo con Next Gen Stats, siendo liderado por Jared Goff, su corredor Tod Gurley y los receptores Woods, Cooks y Kupp.
No sería para nada exagerado afirmar que el Dak Prescott actual es mejor que ese Jared Goff del 2018, al igual que Elliott se encuentra en mejor forma que el Gurley del 2018 y que el trío de receptores vaqueros es mucho más pulsante (en el papel) de lo que lo fueron el trío de Los Angeles.
Por ende, utilizar el 11-Personnel podría ser un camino seguro al triunfo para los Cowboys, que no tan solo tienen las herramientas perfectas para brillar en ese esquema, sino también el apoyo casi total del resto de equipos de la liga; una liga la cual se ha convertido en una que le ha dado una prioridad impresionante a este tipo de formación.
En el lapso del último par de décadas, el 11-Personnel pasó de ser una formación rara vez usada a ser la más empleada por los equipos de la NFL (y por mucho). Siendo utilizada en la actualidad en más de un 60% de las veces.
A continuación, un gráfico que ejemplifica los cambios en la preferencia del personnel desde el año 2008 hasta el 2017:
Aunque no se tenga la estadística exacta de los últimos dos años, está claro que el 11-personnel siguió creciendo, pues no cuesta nada darse cuenta que ha sido ampliamente la más utilizada por las ofensivas.
La razón por la que el 11-personnel se ha vuelto tan popular es por el hecho de que no delata las intenciones de la ofensiva (bien sea si van a correr o pasar el balón), ya que típicamente, una formación con dos o tres TE significa que irán por tierra o una de cuatro o cinco WR significa que irán por aire. Pero cuando se tienen un solo RB, un TE y tres WR, mantienes a la expectativa a las defensivas rivales hasta el último instante.
En el caso de los Cowboys, estos la utilizaron en el 67% de los snaps la temporada pasada, el cual es un número bastante grande, pero podría subir aún más este año (me atrevería a decir hasta un 80% o más).
El 11-personnel le daría muchas más movilidad a Prescott, quien podría realizar muchas más jugadas de play-action (faceta en la que destacó la temporada pasada), así como también la oportunidad a Zeke de volver a ese gran nivel que nos tiene acostumbrados y no vimos la temporada pasada.
Así que en definitiva, si los Cowboys son capaces de ejecutar su ofensiva en 11-personnel la mayoría de las ocasiones (por lo menos en un 80% de los snaps), me atrevería a decir que estos pueden llegar a tener el mismo éxito que los Rams del 2018; pero eso sí, ganando el Super Bowl a diferencia de los Carneros que se vieron maniatados por los Patriots en ese partido final de temporada.