Los Cowboys llegaron hasta la ronda divisional la temporada pasada cayendo ante Los Angeles Rams incluso a pesar de haber tenido una floja ofensiva en cuanto a números. Esta unidad terminó 22ª en cantidad total de puntos (339) y de yardas (5501). Aún así logró ganar la División Este de la Conferencia Nacional y superar en la ronda de comodines a los Seattle Seahawks. Uno de los problemas a solucionar fue la cantidad de capturas permitidas, pero ahora es momento de hablar de la falta de creatividad que hay que dejar atrás.
A pesar de que apenas son los primeros entrenamientos y los jugadores no están completamente equipados ni realizando los movimientos con mucha intensidad, ya se empiezan a ver los primeros destellos de estos cambios tan anunciados y necesitados. Uno de ellos fue el de mover a la ofensiva antes del centrado del balón. Quienes estuvieron presentes en la primera práctica del campamento de entrenamiento con Kellen Moore como coordinador ofensivo reportan que abrió el ensayo con una formación pesada, con Jason Witten y Blake Jarwin del lado derecho. Sin embargo, ni bien Dak Prescott se colocó detrás del centro, movieron a los dos alas cerradas al lado izquierdo y Amari Cooper pasó a estar cerrado cerca de la formación.
Esto es lo que se conoce como pre-snap motion y es lo que caracteriza, por ejemplo, a los Rams de Sean McVay. En caso de que la ofensiva de Moore llegue a, aunque sea, acercarse a lo que hacen los angelinos sería una mejora enorme. También comentan que hubo varias jugadas en las que Prescott le dio la espalda a la defensiva en engaños de play action y después de eso debía identificar cómo se iban desarrollando las diferentes rutas. Esta acción marca un indicio de que hay mucha más confianza en que el mariscal de campo mejore sus lecturas del juego y lo pueda hacer consistentemente.
Combinar diferentes rutas por parte de los receptores y hacer que los corredores también hagan eso es otro de los detalles que de a poco van identificando la filosofía de Moore. El objetivo es generar confusión en la defensiva rival para poder conseguir mejores espacios, lo que derivará en ventanas más amplias para que Dak realice sus lanzamientos con mayor tranquilidad. Justamente sobre Prescott también está buscando una pequeña modificación en sus mecánicas para que mejore la precisión de sus envíos.
“Fuimos realmente buenos en muchas cosas y podemos darle más pimientas en algunas cuestiones. Y este momento del año es ideal para probar algo nuevo. Algunas te van a gustar y otras las vas a descartar”, explicó Moore.
Una de las cuestiones a las que también tendrá que acostumbrarse Moore en su nuevo rol no es simplemente el hecho de ser el encargado de elegir las diferentes jugadas ofensivas. Cuando era entrenador de los QBs en la temporada pasada debía dar su punto de vista y correcciones ante pocas personas. Ahora, debe pararse ante más de 20 jugadores y comunicar con la misma firmeza, haciendo que la unidad comprenda y acepte su idea de juego. “Al final del día pienso que tienes que ser tú mismo. Es una sala de comunicación. Queremos entrar ahí y comunicarnos”, comentó.