Todos los equipos de la NFL deben reducir sus rósters a 53 hombres antes del próximo sábado 31 de agosto a las 4 p.m. horas del este, y lamentablemente ciertos jugadores quienes serían titulares incuestionables en otras franquicias, se quedarán fuera de la lista vaquera debido a la gran profundidad y talento que maneja actualmente este club.
Razón por la cual, el vicepresidente del equipo, Stephen Jones ha declarado ser “todo oídos” ante las numerosas llamadas que ha estado recibiendo de otros clubes quienes están en búsqueda de reforzar su plantilla; algunos con jugadores de la línea defensiva, otros en búsqueda de jugadores en la línea ofensiva.
“Sí recibimos llamadas tanto por jugadores ofensivos como defensivos”, dijo Jones el miércoles. “Lo hemos convertido en una prioridad a lo largo de los años, es una de nuestras fortalezas (refiriéndose a la profundidad en ambas líneas), y algunos equipos están interesados en ello”.
Es de esperarse que los Cowboys estén involucrados en algunas transacciones, o por lo menos una, en las próximas 48 horas antes del tiempo límite, como lo dejó saber Jones diciendo: “Sí, creo que hay una posibilidad segura de que hagamos un movimiento con alguien”. Además añadió que de darse dicho movimiento, estaría buscando una elección de draft más que otro jugador ya que la plantilla actual se ve sólida y sin falencias:
“Diré esto: Este es uno de los mejeros rósters que hemos tenido en mucho, mucho tiempo, pero nunca se le dice que no a la posibilidad de encontrar algo que nos ayude a seguir mejorando. Ciertamente, estaremos buscando eso. Uno de los problemas que tenemos ahora mismo es que estamos cortos en cuanto a lugares disponibles.”
Desde el punto de vista financiero, los Cowboys se beneficiarían más cambiando a jugadores como Cameron Fleming ($1,5 millones del cap; $750.000 dólares en dinero muerto), Taco Charlton ($1,3 millones; $1,3 millones) o Robert Quinn ($8 millones de dólares; $0), quien además fue suspendido por los dos primeros partidos de la temporada regular, y cuyo valor comercial como tal es inexistente.
Al fin y al cabo, de todos los problemas que se le pueden presentar a un equipo, el no tener lugar suficiente para tanto talento es el más agradable; teniendo eso en cuenta, los Cowboys pondrán un pie en el mercado y buscarán hacerse con adiciones que serían interesantes a futuro a cambio de jugadores que no llegarán al róster este año, un negocio redondo.
