Los Cowboys tendrán la gran posibilidad de comenzar la temporada 3-0. El rival no será otro que Miami, el peor equipo de la liga. Sin embargo, hay algunas cuestiones que harán que Dallas quizás deba preocuparse, cosas relativas a problemas propios y no a complicaciones que genere su rival.
El tema principal que Jason Garrett deberá tener en cuenta son las lesiones. En el reporte del día vienes quedó confirmado que seis jugadores están descartados para el tercer partido de la campaña. Ellos son Michael Gallup, Tyrone Crawford, Xavier Woods, Antwaun Woods, Luke Gifford y Tavon Austin.
Las modificaciones que se harán no deberían poner el resultado en riesgo, pero si implicarán cambios leves en la selección de jugadas. La ausencia más relevante es la de Gallup. El receptor abierto demostró en este inicio que la coordinación que se vio entre él y Prescott mejoró mucho. Por una lesión en su rodilla izquierda se perderá algunas semanas.
También se determinó que Austin no se logró recuperar de una conmoción y por segundo partido consecutivo deberá ser espectador. Esto le abre un muy buen lugar a Smith, uno de los más destacados en la pretemporada, quien logró una anotación de 51 yardas contra los Redskins y sería el objetivo principal en los pases profundos. Cedrick Wilson es otro jugador que está ante una enorme oportunidad teniendo en cuenta que seguramente sea el devolvedor de despejes. Hay que recordar que la defensiva rival permitió 102 puntos en dos partidos, por lo que no sería lógico alarmarse.
Del otro lado del balón hay más bajas a considerar. Antwaun Woods no podrá jugar por una lesión en una de sus rodillas. Esto hace que Chris Covington vea más tiempo de juego y que la selección de segunda ronda Trysten Hill, también lo haga. Principalmente porque tampoco estará Crawford.
Así es que Garrett deberá encontrar al pass rusher opuesto a DeMarcus Lawrence. Lo más probable es que sea Robert Quinn quien reemplace a Crawford. Quinn puede volver tras estar suspendido por dos semanas. La otra opción es que Dorance Armstrong ocupe ese lugar.
Donde quizás sea más complicado suplir a una de las distintas bajas por no haber tanta profundidad es en el puesto de safety. Con Xavier Woods afuera por lesión, será Darian Thompson quien ingrese.
La ofensiva de los Dolphins carece enormemente de amenazas. A esto se le agrega que Brian Flores finalmente cambió su decisión inicial y será Josh Rosen el mariscal de campo. Con Ryan Fitzpatrick quizás podría haber más intentos de balones profundos, pero Rosen tiene una mayor preferencia por las rutas medias.
A modo de conclusión se puede decir que los Cowboys deben resolver el partido lo antes posible y cuidar a los jugadores más importantes de ser necesario. Principalmente porque en un deporte como este mantener a todos los jugadores sanos es determinante en muchas ocasiones.
Here is the final practice report for the week. pic.twitter.com/Z2QZTTahFL
— Calvin Watkins (@calvinwatkins) September 20, 2019