Con el comienzo de una nueva temporada cada vez más cerca es momento de presentar los duelos más destacados que tendrán los Cowboys. Es por esto que seleccioné tres duelos que creo que serán imposibles de perderse por distintas cuestiones. Una aclaración necesaria antes empezar es que dejé de lado los duelos divisionales ya que, por la forma en que se arma el calendario de la NFL y por cómo se clasifica a los playoffs, son siempre importantes y decisivos.
El más difícil
Mirando una sola vez el calendario de los Cowboys alcanza para determinar cuándo tendrá el duelo más complicado: en la semana 12, el 24 de noviembre, Dallas visitará a los New England Patriots. No hace falta decir qué tan difícil es jugar contra Tom Brady y Bill Belichick, pero, además, este juego tiene dos condimentos como el tiempo y el lugar que lo hacen aún más duro. En cuanto al primero de ellos, se va a jugar pasada la mitad de temporada, un momento del año en el que los campeones defensores seguramente ya estén en ritmo de competencia y con confianza. El segundo argumento que dificulta a los Cowboys es el escenario, ya que, si bien siempre cuesta vencer a los Patriots, hacerlo en Foxborough es casi una misión imposible.
Al ser dos equipos de Conferencias distintas los enfrentamientos entre ambos no son tan frecuentes, por lo que el último choque entre estas dos franquicias se llevó a cabo en la semana 5 de la temporada 2015 y fue triunfo 30-6 de los Patriots en Dallas. A pesar de liderar el historial 7-5, la última vez que los Cowboys lograron imponerse fue el 15/12/1996. Ya que New England lleva cinco triunfos consecutivos.
Buscando revancha en un duelo importante
Pensando directamente en lo que puede ser un camino a los playoffs, hay que destacar lo que sucederá en la semana 15. El 15 de diciembre Dallas recibirá a Los Angeles Rams en lo que será un duelo atractivo por dos aspectos, el deportivo y el emocional. Pensando en lo deportivo, será cerca del final de la temporada regular ante la franquicia que llegó al último Superbowl y cayó ante los Patriots. Además, podría ser decisivo para el ordenamiento en caso de que ambos lleguen a postemporada. Es decir que, si los dos ganan sus respectivas divisiones, podría definir la posibilidad de comenzar en ronda divisional y jugando como local.
Por el lado de lo emocional, es una gran oportunidad para que los Cowboys se tomen revancha del equipo que los eliminó en enero de este año. En el choque correspondiente a la ronda divisional de la NFC, los Rams se impusieron con un dúo terrestre imparable conformado por Todd Gurley y CJ Anderson, que consiguieron 115 (1 TD) y 123 yardas (dos anotaciones), respectivamente.
Una rivalidad imperdible
Otro encuentro que será más que un partido de fútbol americano será el que los Cowboys tendrán el 6/10 correspondiente a la semana 5. El rival no será otro que Green Bay Packers. Sí, un enfrentamiento que en los últimos tiempos dio grandes batallas y muchas polémicas. Uno de ellos fue el famoso “No catch game”, en el que Dez Bryant completó un pase de 32 yardas prácticamente en la zona de anotación faltando algo más de cuatro minutos, pero que fue anulado porque los árbitros dieron marcha atrás tras revisar la jugada. Green Bay ganaría 26-21 ese juego disputado el 11/1/2015 en Lambeau Field.
Más cerca en el tiempo, el 15 de enero de 2017, se vivió otro duelo infartante de postemporada que terminó inclinándose para los Packers. Jugando en Dallas, los visitantes arrancaron ganando 21-3 ante unos Cowboys que eran los sembrados #1 de la NFC. Sin embargo, en lo que fue el primer encuentro de playoffs para Prescott y Elliott, lograron llegar empatados hasta el final. Aunque Aaron Rodgers hizo una de las suyas: en 3ra y 20 desde la yarda 32 de los Packers con doce segundos en el reloj, encontró a Jared Cook, quien atrapó increíblemente el balón para que luego Crosby defina con un gol de campo.