Nota: La agencia libre empieza el 18 de marzo y casi 30 de los 53 jugadores en el plantel de los Cowboys se convertirán en agentes libres. ¿A cuáles mantendrán, a quiénes despedirán y quiénes podrían estar disponibles para adquirir?
Esta temporada baja, nuestro intrépido periodista argentino, Mauro Tognacca, analizará cada posición en el plantel y dará su punto de vista. Hoy veremos a los equipos especiales.
Mucho se habla de las ofensivas y de las defensivas. Son las unidades más importantes y está bien que así sea. Sin embargo, un real contendiente suele tener también buenos equipos especiales.
El ataque de los Cowboys a nivel estadístico fue de los mejores. La defensiva tuvo bastantes falencias, aunque aún así se mantuvo dentro de ciertos límites en los números fríos. Pero el sector en cuestión fue irrefutablemente decepcionante. No es que solamente tuvo un desempeño flojo, sino que comparado con el resto de la NFL estuvo entre los peores.
Los equipos especiales no pueden ser tomados como algo secundario. Por eso es que Dallas apuntó a la llegada de John Fassel como coordinador de la unidad. Fassel está considerado como uno de los mejores en ese puesto por las buenas aptitudes que demostró.
Hay algunas piezas que serán agentes libres sin restricciones. L.P. Ladouceur es el histórico long snapper y su continuidad debería pasar más por una decisión personal que por su nivel. Ladouceur tendrá 40 años en la próxima temporada y podría seguir en la franquicia bajo el contrato mínimo de veterano.
Otro que finaliza su vínculo es Kai Forbath. El pateador llegó para reemplazar al inconsistente Brett Maher y brindó seguridad desde el inicio, convirtiendo tanto sus diez intentos de punto extra como los diez goles de campo que pateó. Los Cowboys necesitan estabilidad en el puesto y seguramente buscarán conservarlo.
Una de las estadísticas más sencillas de explicar es la que indica el lugar del campo donde inician las series ofensivas (average starting field position). El de los Cowboys fue de 26.19 yardas, una cifra que los ubica como los terceros peores. Eso significa que Dak Prescott comenzó las posesiones teniendo que avanzar casi siempre aproximadamente 75 yardas para llegar a las diagonales. Por más buena que sea una ofensiva en algún momento va a fallar con tanto terreno por avanzar.
Una vacante que muy probablemente se abra es en el lugar del devolvedor de despejes. Tal como comenté en el artículo sobre los receptores abiertos, Tavon Austin también será agente libre. La verdad es que no hay muchos motivos para que Dallas se quede con el WR por su nivel.
Austin no logró sumar prácticamente nada regresando los despejes. Arriesgó muy poco y el punto más clarificador ocurrió ante los Vikings. Los Cowboys tenían apenas segundos para conseguir un triunfo milagroso y en ese momento pidió recepción libre a pesar de tener muchas yardas por delante. Randall Cobb se hizo cargo en algunas ocasiones, pero tampoco fue efectivo. Cobb además también será agente libre.
Quizás una alternativa sea adaptar a Tony Pollard a ese rol. Pollard se destacó como regresador de patadas de salida en la Universidad de Memphis, aunque no pudo replicarlo en la NFL. El corredor tiene las destrezas necesarias para generar impacto en la unidad y ayudar a la ofensiva a tener que recorrer menos territorio. Eso le daría mayor relevancia al novato de cuarta ronda y facilitaría la tarea de la ofensiva.
Del otro lado del balón, la situación es la misma. Cuando Dallas es el que despeja, los rivales comienzan sus series ofensiva en promedio desde la yarda 30. Ese número es el quinto valor más alto permitido en toda la NFL.
Eso es en buena parte responsabilidad del punter. Las 37 yardas netas por despeje que promedió Chris Jones fueron la peor marca de la liga. Así es que pensar en un reemplazo podría estar entre las posibilidades. De cualquier manera, Fassel tendrá que trabajar mucho para que esa unidad no siga siendo un punto débil de los Cowboys.
Guía de la agencia libre en Dallas
La ofensiva
La defensiva