Para Travis Frederick, centro de los Dallas Cowboys, todo este último año ha sido una locura. El pasado 22 de agosto de 2018, le diagnosticaron el síndrome de Guillain-Barré. Esta condición hace que el sistema inmunológico ataque al sistema nervioso por error. Por lo tanto, es una enfermedad autoinmune que causa inflamación en los nervios. Como consecuencia, puede causar debilidad muscular y otros síntomas similares.
Ahora bien, ha pasado un año de la noticia y cabe destacar que Frederick está más fuerte que nunca. Para el jugador de 28 años, quien se perdió toda la temporada pasada por esta condición, se está volviendo a sentir como el atleta que era. De hecho, ha estado presente en todas las reuniones, prácticas y por supuesto, ha jugado en los partidos de pretemporada de los Cowboys.
Sin embargo, lo que ha llamado más la atención es la carta que dejó en sus redes el martes en la noche. En donde agradece todo el apoyo que ha recibido de todas las personas vinculadas con su persona, la organización, el equipo médico y por supuesto, los fanáticos.

Esto fue lo que dejó en sus redes de Instagram y Twitter:
“Hoy se cumple un año desde que me diagnosticaron el trastorno autoinmune llamado síndrome de Guillain-Barré. En retrospectiva, este último año ha sido todo un viaje y me gustaría expresar un poco de gratitud. A mis fanáticos, simpatizantes y desconocidos que se han acercado. Gracias por proporcionarme una nueva perspectiva.
A mis entrenadores, doctores, enfermeras y otros profesionales médicos, gracias por seguir presionando hasta que encontramos un diagnóstico y conseguirme la mejor atención disponible lo más rápido posible. Por supuesto a la organización de los Cowboys, gracias por seguir conmigo y permitirme ser parte de una campaña increíble el año pasado. No dejo por fuera a mis especialistas en rehabilitación, gracias por estar a mi lado a través de los momentos difíciles cuando no sabíamos dónde terminaría esto. A mis compañeros de equipo, gracias por aceptar lo que tenía que ofrecer y dejarme seguir en carrera. A mis amigos y familiares, he aprendido que su amor y apoyo no tiene fin, y no puedo agradecerles lo suficiente.
También a todos los que han tendido la mano con sus historias o han pedido apoyo en su viaje o de un ser querido, me han demostrado que hay una enorme comunidad de otras personas que han estado o están pasando por esto. No están solos, hay esperanza.
Lo más importante, a mi esposa Kaylee, gracias por tu guía implacable, cuidado, amor y apoyo, y gracias por todo el arduo trabajo que hiciste para recoger todos los cabos que dejé.
Estoy emocionado de dejar este capítulo de mi vida detrás y volver a la normalidad. Nunca he estado tan feliz de sentirme normal de nuevo”.
Para el centro que ha sido cuatro veces Pro Bowl, esta es una segunda oportunidad que tiene para demostrar lo que vale. Y realmente está haciendo todo lo necesario para volver a la temporada regular. La cual arrancará en el AT&T Stadium el próximo 8 de septiembre. Los rivales de Frederick y los Cowboys serán los New York Giants, con quienes comparten lugar en la NFC Este.