En el transcurso de la semana, se han estado realizando movimientos referentes a los agentes libres de los Dallas Cowboys. No era secreto para nadie que el receptor Amari Cooper era la prioridad de la franquicia, detrás del QB Dak Prescott. Por supuesto, al Mariscal le colocaron la etiqueta de franquicia al no poder llegar a un acuerdo. Pero en el caso de Cooper, lograron firmarlo por un contrato de cinco años y cien millones de dólares.
Claro está, esto creó una situación en donde los fanáticos ya no sabían si verían a uno de sus mejores receptores en otro equipo. Afortunadamente no fue así y el receptor seguirá en el equipo de la estrella solitaria.
The #DallasCowboys and Amari Cooper have agreed to terms on $100 million deal.
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— Dallas Cowboys (@dallascowboys) March 17, 2020
Ahora bien, se veía como una formalidad que Cooper regresara, gracias al canje de selección de primera ronda por el que se trajo. Además que su química con Prescott no se discute y mejora en gran medida la ofensiva de Dallas.
Con respecto al contrato, hay que aclarar que Cooper es el jugador modelo. De hecho, es una de las personas más agradables del roster, aparte que es sumamente callado. Una de las cosas que llamó más la atención es que accedió a las negociaciones sin quejarse. Igualmente, es muy difícil recordar a algún jugador que dijera tan pocas palabras del proceso como lo hizo Cooper.
Por otro lado, se supo de una gran oferta que hicieron los Washington Redskins para hacerse con sus servicios. Aparentemente, le ofrecieron «suficiente dinero para hacerlo el receptor mejor pagado de la liga». Pero con todo y esto, Cooper lo rechazó ya que declaró varias veces que disfrutaba estar en los Cowboys.
De cualquier manera, viendo los números del contrato de Amari, se ve que fue un contrato amistoso, en donde al parecer ambas partes salieron beneficiadas. Todo da a entender que el jugador ganará la mayoría del dinero durante los dos primeros años del mismo.
En dado caso, si en las oficinas de Dallas no llegan a estar contentos con su producción, podrían prescindir de sus servicios y el dinero muerto no representaría mucho, ya que bajaría drásticamente a partir del tercer año de contrato. Estamos hablando de seis millones a partir de 2022, cuatro para 2023 y dos para 2024.
Con este contrato, Amari da a entender que puede jugar dos años a gran nivel y si no les convence su producción, podría buscar cualquier otro destino a partir de 2022. Sin embargo, tomando en cuenta la gran calidad del jugador, se ve muy difícil que se tome esta resolución en un futuro tan cercano. Hay grandes posibilidades de tener a Amari Cooper para rato.
