Philadelphia Eagles (4-4)
Los Eagles pudieron recuperarse de la derrota frente a los Cowboys. En Buffalo consiguieron un triunfo convincente que no estuvo en duda en ningún momento. Carson Wentz tuvo un partido discreto, pero mejor que el que jugó en Dallas. La gran diferencia del 31-13 fue el ataque terrestre, a través del cual Philadelphia aplastó a los Bills con 218 yardas. A eso agregó también tres anotaciones por tierra.
Ahora deberá jugar contra los Bears, buscando volver a tener marca ganadora. Prestándole atención solamente al nombre, debería ser un duelo complicado. Sin embargo, la franquicia de Chicago es una de las decepciones de la actual campaña al ubicarse en el fondo de la NFC Norte con récord 3-4. Philadelphia es el favorito para ganar, sobre todo por la forma en la que está jugando Mitchell Trubisky.
New York Giants (2-6)
Los Giants continúan siendo un muy mal equipo. Visitando a Detroit lo único que consiguieron fue la cuarta derrota consecutiva. Daniel Jones tuvo cuatro pases de anotación, pero cometió un fumble que terminó en touchdown de los Lions. En la derrota 31-26 volvió a ser muy importante Saquon Barkley, quien sumó 143 yardas totales y un TD por la vía aérea.
Probablemente no haga falta aclarar cuál será el próximo desafío de New York, aunque por las dudas hay que recordar que será el rival de los Cowboys este lunes por la noche. Ése va a ser el segundo choque entre ambos en la temporada tras haberse enfrentado en el duelo inaugural. El resultado en esa ocasión fue triunfo de los tejanos 35-17.
Washington Redskins (1-7)
En el Thursday Night Football pasado, se esperaba una derrota por mucho de los Redskins ante los Vikings. Pero el rendimiento fue sorpresivamente bueno y se mantuvieron en juego prácticamente hasta el final. Aunque a pesar del aceptable rendimiento, terminó siendo derrotado 19-9.
Ese duelo tuvo a Case Keenum dejando el campo por una conmoción. Todavía continúa bajo el protocolo requerido por lo que no se sabe si podrá jugar frente a los Bills. Si Keenum no puede hacerlo, sería reemplazado por Dwayne Haskins, quien tuvo otro día olvidable. En la derrota en Minnesota lanzó cinco pases y uno de ellos derivó en una intercepción clave.
