Con la segunda derrota consecutiva de Dallas, esta vez ante los Green Bay Packers, quedan muchas dudas en el aire. Como por ejemplo si el equipo está bien o si realmente son tan buenos como se afirmaba.
La verdad es que el grupo tiene calidad. Sin embargo, el detalle es que quizás el equipo se infló mucho ante unas franquicias que realmente no son top en la NFL. Hablamos de los Giants, los Redskins y los Dolphins.
Por otro lado, tenemos fallas similares a la temporada pasada. Y muchas tienen que ver con la manera en que se llaman las jugadas. Además, Dak Prescott anoche se vio completamente amateur. Y ni hablar de Kellen Moore, que parece que le rindiera tributo a Scott Linehan. Claro está, en el caso de Garrett, esto seguirá siendo un equipo de Jason Garrett, sin ningún tipo de evolución por la manera en que se están viendo las cosas.
En el caso particular de Prescott, esto fue un total desastre. Tres intercepciones en total durante el partido, que fácilmente pudieron ser cinco, solo que la defensa de Green Bay lo perdonó. La que más dolió fue la última durante el comienzo del cuarto período, ya cuando los Cowboys se estaban afianzando en buscar al menos empatar el encuentro. Kevin King se encargó de acabar con esto.
El cierre de broche de oro, fue el gol de campo fallido de Brett Maher después de la pausa de dos minutos en el último cuarto. Con un total de 33 yardas, no pudo convertirlo y fue el segundo de la noche que falló. Son seis puntos que se pierden, no importa la situación. El golpe psicológico es fuerte y que esta haya sido la última jugada del encuentro deja un muy mal sabor de boca para los Cowboys.
Por otro lado, una defensa irreconocible que no tuvo forma ni manera de detener al corredor Aaron Jones, que terminó con 19 acarreos, 107 yardas y 4 Touchdowns. Esto es un récord totalmente negativo para Dallas. Ya que es el primer corredor en toda la historia de los Cowboys que le hace 4 Touchdowns por acarreos a la franquicia.
Otro aspecto importante es que la ausencia de Tyron Smith se notó. Y su reemplazo Cameron Fleming, jugó extremadamente mal, permitiendo muchos espacios y dejando a los de Green Bay hacer lo que quisieran también.
Igualmente, hay otro detalle a tomar en cuenta. Y es que Aaron Rodgers fue una pesadilla, pero ni se acercó a su mejor nivel. De hecho, no logró un solo TD con jugadas de pase. Toda la ofensiva quedó en el corredor Aaron Jones. Si Rodgers lograba al menos dos Touchdowns más con jugadas de pase, la derrota habría sido aún más amarga.
¿Qué se puede rescatar de este encuentro? la entrega de Zeke Elliott, pero toda la ofensiva no puede depender de él. Aparte de Amari Cooper, que terminó con 11 acarreos y 226 yardas. Ambos jugadores terminaron con Touchdowns, junto a Michael Gallup. Por supuesto, esto no fue suficiente. El resultado fue un 34-24 y todos a las duchas.
Ahora bien, el próximo rival son los New York Jets, en condición de visitante. Dallas no puede conformarse y solo derrotar a equipos menores, sin faltarles el respeto. Hay que salir y ganarle a los grandes, y la asignatura quedó pendiente con los Saints y los Packers. Estos últimos son los que van a los playoffs, y son los equipos que buscan ganar a toda costa. Pero con esta actitud algo apagada de los Cowboys, no pueden aspirar a mucho si continúan de esta manera.